La hormona de la felicidad. 

2 noviembre, 2015 at 10:08

Queridos amigos y amigas.
Hay unas endorfinas que también se llaman » hormonas de la felicidad » y que en estos días leí en un artículo que podemos aumentar el nivel en nuestro cuerpo para ser más felices y me pareció interesante compartirlo con ustedes. 
Las » endorfinas» son unas sustancias químicas que produce el propio organismo y que te generan estados felices porque te estimulan la parte que tenemos en el cerebro que nos envía los mensajes de felicidad y sensaciones de placer.
Decía el artículo que cuando realizamos actividades placenteras se produce un mayor número de estas hormonas provocando inmediatamente un cambio de carácter y nuestro estado de ánimo mejora inmediatamente. A veces necesitamos una » doble ración» de endorfinas. 
Y es que casi siempre, esos pequeños detalles de placer vital los tenemos al alcance de la mano y no nos damos cuenta. Despertarte con el canto de un gallo, oler la lluvia, recibir una sonrisa de una persona que te quiere, comerte un mango caído del árbol y mancharte la camisa, abrazar a tu sobrina de seis meses, saber que, al menos, algunas personas te quieren de verdad, y tantas y tantas cosas que nos suceden a diario para hacer » trabajar el cerebro» y aumentar esas endorfinas. 
También decía el artículo que hacer ejercicio físico te ayuda. Yo estoy de acuerdo y por eso camino todos los días por Candelaria y ciertamente, cuando termina la caminata siempre me encuentro mejor. Aprovechas para hablar de cómo ha ido el día, de ahuyentar la pereza, de soñar con proyectos y de sonreír. 
Decía el artículo que la monotonía, el aburrimiento y la rutina es muy perjudicial para la generación de las hormonas de la felicidad. Cambiar siempre, hacer cosas diferentes, y planificar con optimismo. » la gran fuente de la felicidad está en sorprenderse de las pequeñas cosas de la vida». Los cambios, la aventura, los descubrimientos, las sensaciones. 
También estar enamorado las genera. El amor a veces te lleva a situaciones de añoranza y de divinidad. Las rupturas amorosas ya son » harina de otro costal». 
Pero una de las cosas que genera una mayor carga de endorfinas es la risa, aunque aquí existe un problema: si te ríes de los demás te vas convirtiendo en una mala persona y las hormonas de la felicidad llegaran a desaparecer. Por eso, lo mejor, es » reírnos de nosotros mismos». Quien es capaz de reírse de uno mismo es capaz de discernir todo en la vida. 
Las ilusiones sanas son vitales para poder ser felices y generar estados de placer. Si tenemos ilusiones sanas podemos mantener siempre una situación de búsqueda de la felicidad.
También recordar sucesos felices que te han pasado en la vida producen estados de felicidad. Esto siempre lo he practicado y recuerdo una vez que en una reunión cuando estaban hablando de un tema importante, esbocé una pequeña risa para sorpresa de todos los asistentes porque, justo en ese momento, me acordé de una situación vivida con Vitolo en un restaurante que cada vez que la recuerdo me » parto de risa» … Algún día se las contaré si él me lo autoriza, claro. 
También tenemos una isla maravillosa para vivir felices y generar endorfinas positivas porque el contacto con la naturaleza produce una sensación de placer. Pues qué mejor que Tenerife para ser felices.
La música, sobre todo la melódica, decía el artículo que producía una sensación de placer que el cerebro inmediatamente convertía en hormona de la felicidad e incluso generaba una importante relajación muscular. Por eso es que cada vez que voy a Jose de Fisiosport me quedo dormido con la música que suena. 
Es por eso que solo espero que este post de hoy les genere «endorfinas» que no es otra cosa que » la hormona de la felicidad» . Que los mensajes que recibamos sean positivos, que los que enviemos sean iguales de optimistas y que entre todos podamos ser un poco más felices.
También decía el artículo que lo peor para generar endorfinas era la envidia. Sobre todo la envidia a lo material. Hay un refrán que me encanta que dice que » al que Dios se lo da, San Pedro se lo bendiga» . Practiquemos mucho más esa frase que dice – me alegro-. 
Tengo que dejarlos porque me vienen a buscar unos amigos para ir a caminar y hace un día espléndido con un sol otoñal radiante y eso me genera endorfinas.
También ya tuve una gran dosis de hormonas positivas cuando olí esta mañana temprano el café recién salido de la cafetera tradicional de toda la vida.
Como siga así, tendré que ir al médico por un exceso de endorfinas. Jejejejeje. 
Feliz lunes,primo hermano del domingo.